El Cuento de una Perla Shika

Hay gente que no la sabe tratar, no sabe lo que se encuentra dentro de ella... Tan fuerte pero que tan solo unas palabras la puedan llegar a hacerla marchitar.

Sólo aquel que la conoce realmente puede sorprenderse de la gran perla que se esconde dentro de ese molusco, ese molusco que por fuera puede parecer frío y tosco, pero a su vez encierra la magia y el brillo de una gran perla.

Me alegro de tener la virtud de poder ver al menos esa perla de vez en cuando, de que esa perla me cuide, y se preocupe por mí; como si el caparazón de la ostra me recogiera en su interior y me protegiera del mundo exterior.

Mi pequeña perla ha huido muchas veces del mundo para intentar encontrarse ella misma, pero se da cuenta tanto o más que yo, que el mundo en el que vive no la comprende, ni siquiera lo intenta...y eso... pequeña perla... te hace desvanecer.

Los días pasan y tu compañía me hace sentir bien, y cuando no lo estoy... tu me haces recordar quien soy cuando a los demas ni les importa y eso me hace sentir especial, es demostrarme que eres una verdadera amiga.

Me da igual lo que piensen los demás, y lo que tu creas que piensan de tí; porque para mí eres importante, tan importante que en momentos de desesperación tu me has hecho ver la luz con ayuda de tu brillo.

Pequeña perla, hoy te escribo para decirte lo que casi nunca te digo y está mal, ya que en realidad debería de decirtelo todos los días.

Quiero que no cambies nunca porque espero poder seguir puliéndote, para que al final entre las dos, consigas formar el collar que tu quieres. Ese collar tan distante de tu vida y tan soñado.

Te quiero Shikitilla, y sé que conseguirás formar el collar, que encontrarás las perlas a lo largo de tu camino con paciencia y voluntad, sé que podrás...y cuando desfallezcas yo estaré ahí, te lo prometo. Confio en tí; sé que nunca me defraudarás, porque nunca lo has hecho.

Sí los demas supieran la perla que tengo...

Felicidades!!! :D